Con la preparación adecuada, viajar con niños y niñas que viven en condición de discapacidad puede ser una experiencia positiva. Aquí te compartimos algunas recomendaciones para que puedas disfrutar el viaje de manera cómoda y segura.
- Asegura que el vehículo esté en buen estado. Revisa las gomas, frenos, luces y cualquier advertencia que presente el tablero antes de salir.
- Agrega a tu teléfono los números de asistencia vial en caso de que se presente alguna emergencia.
- Instala una silla de seguridad de acuerdo con la edad de cada niño o niña. Es obligatorio por ley y es la forma más segura de protegerlos en caso de accidente.
- Si el niño tiene una discapacidad cognitiva, explícale el viaje de manera sencilla, donde irán y el tiempo estimado que tomará, asegurándote de que comprenda lo que sucederá.
- Evita las horas y zonas con mucho tráfico, ya que esto puede causar estrés en los niños con alguna condición. Ten paciencia y toma descansos en viajes muy largos para evitar incomodidad.
- No utilices el teléfono móvil, no comas ni bebas mientras conduces. Mantente enfocado en la carretera en todo momento.
- Lleva meriendas y bebidas saludables para ofrecer a los niños y niñas durante viajes muy largos.
- Prepara un botiquín con los medicamentos esenciales para toda la familia. Incluye copia de la historia clínica, indicaciones médicas y cualquier información relevante sobre su condición para poder proporcionar detalles en caso de una emergencia.
- Lleva juguetes que mantengan ocupado al niño durante el viaje, como libros, juegos educativos o música que le guste.
- Conduce a una velocidad adecuada y respeta las señales de tránsito.
- Si vas a realizar un viaje largo, realiza paradas cada dos horas para que el niño descanse y pueda estirar las piernas.
¡Haz del viaje una experiencia de disfrute y paz, para ti y los tuyos!